¿Cómo funcionan los remates y la ‘reventa’ de inmuebles?

Jueves, 26 de agosto de 2021

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Varias empresas dedicadas al negocio de finca raíz en Colombia se han volcado a la inversión en inmuebles en remate para remodelarlos y revenderlos a precios muy asequibles.

¿Cómo funcionan las empresas de ‘reventa’?

Lo primero es averiguar qué inmuebles están en proceso de remate y a cuánto asciende la deuda de su propietario. Luego hacen una valorización de dicho inmueble y con base en ella, construyen una propuesta para el propietario. Después de un acuerdo, que normalmente beneficia a las dos partes, el inmueble queda en manos de la empresa de ‘reventa’.

Esta empresa sanea el inmueble y lo pone en venta, a un precio – casi siempre- más bajo que el promedio del mercado.

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Quien esté interesado en este tipo de inmuebles, además de conocerlos antes de comprarlos, puede hacer el proceso financiero como cualquier otro inmueble. No hay ningún tipo de restricción.

¿Qué es un remate?

Es una de las opciones que ofrece el mercado inmobiliario a la hora de adquirir vivienda. En resumidas cuentas, se trata de hacer un negocio a través de una subasta, en la que se pone un precio base, y luego, varias personas ofrecen un precio en dinero por la propiedad (remate) y el inmueble queda en manos de quien ofrezca más dinero.

¿Cómo funcionan los remates?

Un remate funciona, básicamente, en tres momentos. Debido a que es mediante la modalidad de subasta, se anuncia el valor base del inmueble. A partir de este, los interesados empezarán a ofrecer dinero según sus capacidades económicas.

El primer momento de subasta se define en el 70 por ciento del inmueble; el segundo en un 50 y el tercero y último en un 40. Cabe aclarar que cuando un inmueble es subastado –fijado en un 40 por ciento- es porque sus condiciones y características comerciales no son de suficiente garantía para su futuro propietario.

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Hay que tener en cuenta que un inmueble en remate, generalmente, es producto de una incapacidad de pago del crédito por parte de un anterior propietario. De ahí la importancia de calcular las capacidades de pago antes de decidir la compra de una vivienda.

Ahora bien, como es una propiedad que fue hipotecada por alguna entidad, es probable que tenga demandas como consecuencia de la falta de pago de la persona que la ocupaba. Estas demandas –si no se clarifican con dicha entidad- podrían generar problemas jurídicos y legales al nuevo propietario. Aunque esta no debe ser una razón por al cual los oferentes dejen de interesarse, todo es cuestión de tener en cuenta todos los temas legales.

Ventajas de los remates

Cualquiera que piense en comprar un inmueble más económico que el promedio pensaría que es mucho mejor sumarse a las subastas en los remates; sin embargo, comprar un inmueble que ya pasó por este proceso evita ese engorroso ‘camino’ que es común en algunos remates: el inmueble no se puede conocer hasta que se haya adquirido, es necesario contar con un capital significativo para arreglos, y el dinero de la vivienda debe entregarse – en su totalidad- en poco tiempo.

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¿Cómo funcionan?

Todo remate de bienes raíces (subasta) se realiza con la participación de un juez, quien realizará todo el proceso jurídico-legal pertinente para la venta o traspaso del inmueble. Ante esto, las inmobiliarias registradas y legales funcionan como un excelente asesor.

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