MIRA LA RESEÑA DE LA PELÍCULA DEL PRÓXIMO EPISODIO
Cómo combatir las humedades en los garajes
La solución exige una intervención especializada para garantizar resultados efectivos y duraderos. Es fundamental impermeabilizar las superficies y mejorar la ventilación
idealista
17 Diciembre 2024, 6:01
Artículo escrito por Sandra Barañano, directora técnica de Cuida Tu Casa
Los garajes, subterráneos o en planta baja, son espacios propensos a sufrir humedades debido a su ubicación en zonas inferiores, las más afectadas en caso de inundación. Algo que no solo afecta la estética del lugar, sino que puede comprometer la estructura del edificio, generar malos olores y fomentar la proliferación de moho y hongos.
Así, encarar este problema es fundamental para garantizar la seguridad, la salubridad y la durabilidad de estas zonas. Para ello hay que conocer cuál es el problema y seguir varios pasos para ponerle solución.
Tipos de humedades en garajes
Para empezar, es necesario conocer el tipo de humedad. Existen diversos tipos de humedades que pueden afectar un garaje, cada una con sus propias causas y soluciones:
- Por filtración. Ocurre cuando el agua del exterior penetra a través de las paredes o el suelo del garaje. Suele presentarse en garajes subterráneos o semienterrados, donde la presión hidrostática del terreno circundante fuerza el ingreso del agua.
- Por capilaridad. Se da cuando el agua del subsuelo asciende a través de los poros del material de construcción, como muros de hormigón o ladrillo. Este problema es común en garajes antiguos o mal impermeabilizados.
- Por condensación. La condensación ocurre cuando el aire húmedo entra en contacto con superficies frías, formando gotas de agua. Esto es frecuente en garajes mal ventilados y con temperaturas variables, especialmente en climas húmedos.
- Accidental. Se produce por fugas o roturas en las instalaciones de agua o desagües dentro del garaje, generando acumulación de agua en el suelo o paredes.
Consecuencias negativas
A continuación, debemos conocer las consecuencias negativas de las filtraciones y humedades no tratadas a tiempo.
- Deterioro estructural: las filtraciones de agua pueden debilitar los cimientos, las paredes y el pavimento del garaje.
- Aparición de moho y hongos: el exceso de humedad crea un ambiente ideal para el crecimiento de microorganismos que afectan la salud de las personas y generan malos olores.
- Corrosión de instalaciones: los elementos metálicos, como tuberías y sistemas eléctricos, son susceptibles a la oxidación en entornos húmedos.
- Desvalorización del inmueble: un garaje con problemas de humedad disminuye el valor de la propiedad y puede generar gastos imprevistos para los propietarios.
Soluciones para las humedades en garajes
La solución de las humedades en un garaje requiere una intervención especializada para garantizar resultados efectivos y duraderos. Este apartado tiene varias etapas.
El primer paso es realizar un diagnóstico detallado del origen de la humedad. Un equipo de profesionales evaluará las condiciones del garaje, identificará las áreas afectadas y determinará el tipo de humedad presente. Este análisis puede incluir el uso de herramientas avanzadas, como cámaras termográficas y medidores de humedad.
Una vez identificado el origen, es crucial impermeabilizar las superficies expuestas. Los métodos más comunes incluyen membranas impermeabilizantes, que se aplican sobre las paredes y el suelo para crear una barrera contra el agua; inyección de resinas, una vía ideal para sellar fisuras en muros y suelos donde el agua se filtra; y morteros impermeabilizantes para recubrir superficies porosas y evitar la entrada de agua.
En casos de humedad por condensación, mejorar la ventilación del garaje es esencial. Esto puede incluir la instalación de sistemas de ventilación mecánica, la colocación de rejillas de ventilación cruzada para favorecer la circulación de aire o el uso de deshumidificadores en áreas críticas.
En garajes subterráneos o en zonas con alta presencia de agua freática, es fundamental instalar sistemas de drenaje perimetral para desviar el agua lejos de la estructura. Para esta instalación, pueden emplearse zanjas drenantes alrededor del garaje, tubos de drenaje conectados a sistemas de evacuación o pozos de bombeo en casos de alta acumulación de agua.
Las grietas en paredes y suelos son vías de entrada para el agua. Los profesionales aplicarán productos específicos, como morteros de reparación o selladores epóxicos, para cerrar estas fisuras y evitar futuras filtraciones.
Finalmente, hay que realizar un mantenimiento preventivo periódico a través de varias actuaciones como
- Revisar regularmente el estado de las impermeabilizaciones.
- Mantener las rejillas y sistemas de drenaje limpios y operativos.
- Inspeccionar las instalaciones de agua y desagüe para evitar fugas.
- Controlar los niveles de humedad con dispositivos electrónicos.
En caso de duda, consulte a un profesional. ¡Queremos combatir las humedades en el garaje eficientemente!
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