El BMW M4 CS y el Shelby GT350, dos bestias de la generación anterior, se enfrentan en una serie de emocionantes carreras de aceleración. ¿Quién se coronará como el rey de la velocidad?
El F82 BMW M4 CS presume de un motor de seis cilindros en línea biturbo de 3.0 litros, capaz de generar 460 caballos de fuerza y 600 Nm de torque. Con tracción trasera, una caja de cambios automática de doble embrague de 7 velocidades y control de lanzamiento, este deportivo alemán pesa 1580 kg. En 2017, su precio base rondaba las 89,000 libras.
Por otro lado, el Shelby GT350 ruge con un motor V8 atmosférico de 5.2 litros, entregando 550 caballos de fuerza y 542 Nm de torque. Equipado con tracción trasera y una transmisión manual de seis velocidades, este muscle car americano pesa 1680 kg y tenía un precio de salida de 61,000 libras en 2019. Una diferencia de casi 30,000 libras en comparación con el BMW.
Antes de la batalla en la pista, es crucial escuchar el rugido de cada contendiente. El seis cilindros biturbo del BMW se enfrenta al V8 atmosférico del Shelby. El escape del Shelby no es de fábrica, lo que añade un elemento extra de emoción a la comparación sonora.
El duelo comienza con una prueba de sonido. El BMW M4 CS, con su característico sonido alemán, se enfrenta a la melodía gutural del Shelby GT350. El escape modificado del Shelby añade una profundidad y agresividad al sonido del V8 americano.
Comparación de sonido entre el BMW M4 CS y el Shelby GT350
La primera carrera se realiza con ambos coches utilizando sus respectivos sistemas de control de lanzamiento. El BMW, con su caja automática de doble embrague, busca una salida limpia y eficiente. El Shelby, con su transmisión manual, requiere más destreza del conductor para lograr una arrancada perfecta.
El BMW toma la delantera rápidamente, aprovechando la eficiencia de su caja de cambios y el control de lanzamiento. El Shelby, a pesar de su potencia bruta, lucha por mantener el ritmo. El control de lanzamiento del Shelby, con sus peculiaridades, dificulta la salida perfecta.
BMW M4 CS tomando la delantera en la carrera de aceleración
Se decide realizar una segunda carrera, esta vez sin control de lanzamiento para el Shelby. El conductor del muscle car americano busca domar la potencia del V8 y lograr una salida más agresiva.
Sin el control de lanzamiento, el Shelby demuestra su verdadero potencial. La salida es mucho más efectiva, permitiendo al muscle car americano pelear codo a codo con el BMW. La carrera es mucho más reñida, con ambos coches cruzando la línea de meta casi al mismo tiempo.
Shelby GT350 acelerando en la carrera contra el BMW M4 CS
Finalmente, se realiza una prueba de frenado desde 160 km/h. Ambos coches demuestran una excelente capacidad de frenado, pero el BMW se detiene en una distancia ligeramente menor. El peso extra del Shelby y la distribución del peso podrían haber influido en el resultado.
Prueba de frenado del BMW M4 CS y el Shelby GT350
El BMW M4 CS y el Shelby GT350 ofrecen experiencias de conducción muy diferentes. El BMW, con su refinamiento alemán y tecnología avanzada, se centra en la precisión y la eficiencia. El Shelby, con su carácter americano y potencia bruta, prioriza la emoción y la visceralidad. La elección entre ambos depende del tipo de experiencia que busque el conductor.