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¿Tienes más dinero que gusto? En Ferrari puede que te empiecen a poner pegas a tus absurdas ideas…

Aarón Pérez

7 feb. 2025 12:59h.Compartir

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Ferrari sabe que no todo vale con sus clientes. Aunque tengas todo el dinero del mundo, la marca será la que tenga la última palabra en términos de personalización.

La relación de Ferrari con sus clientes tiende a ser buena siempre y cuando éstos se mantengan dentro de unos estándares que la marca considera de respeto hacia su imagen. Si no los cumplen, en Maranello no tienen ningún problema en dejar de prestar servicio a estos clientes o, por el contrario, emprender medidas legales que llevarán ante la justicia de ser necesario.

De este modo, la firma del Cavallino Rampante lucha contra las falsificaciones y trata de impedir que los clientes que deciden modificar sus coches lo hagan con lo que en Ferrari consideran mal gusto. De hecho, ya ha ocurrido en más de una ocasión que la compañía italiana se ha querellado contra algún cliente que ha personalizado su coche sin permiso de la marca.

En Ferrari tienen claro que no todo vale y ya ponen límites a sus clientes

Y es que tener dinero no es sinónimo de tener buen gusto. Los ricos no siempre tienen ese estilo necesario para personalizar un coche y que quede francamente bien. Por eso, Ferrari ofrece un completo programa de personalización en el que este tipo de clientes pueden encontrar asesoramiento profesional para que el resultado del trabajo tenga la calidad propia de la marca.

Eso sí, no todo está permitido en este programa, a pesar de que los clientes tienen a su disposición todo tipo de opciones de pintura, materiales y colores para la tapicería, molduras, llanas, costuras… Todo lo que puedas imaginar. Aunque antes deberá estar debidamente aprobado por Ferrari.

La marca italiana ha llevado a cabo una evaluación minuciosa de qué esquemas de colores son aptos para que luzcan sus coches para evitar que esto pueda dañar la imagen de la marca. En una entrevista reciente de Benedetto Vigna, CEO de Ferrari, con el diario británico The Telegraph, el directivo italiano insinuó que Ferrari quiere evitar ciertas configuraciones “chillonas”.

Nada muestra mejor que vivimos en un cambio de era que un Ferrari eléctrico: todo apunta a que aparecerá en octubre

Cuestión de imagen de marca

“Hemos estado pensando internamente en predefinir las combinaciones (de colores)”, dijo Vigna durante la entrevista. “Tenemos que prestar atención porque tenemos que defender los valores y la identidad de la marca. No haremos un coche extraño, seguro”.

De este modo, Ferrari parece confirmar que no tienen ningún reparo en decir que no a las exigencias de un cliente de su programa de personalización. Nadie, en su sano juicio, quiere ver un Ferrari marrón o de color rosa. Y Ferrari es la primera interesada en que esto no suceda.

Si la marca no pusiera límites a la hora de personalizar los coches, cualquier millonario con más dinero que gusto querría comprar un Ferrari y pintarlo de alguna combinación de colores que provocara que el coche se acabara viendo vulgar. La compañía saldría perjudicada de esta permisividad, y podría perder ventas entre los clientes más selectos y exclusivos.

El programa de personalización de Ferrari es de los más completos del mundo

El programa de personalización de Ferrari es uno de los más completos del mundo. El servicio va más allá de pinturas exclusivas y opciones de llantas personalizadas. Permite a los clientes más selectos diseñar y dar forma a creaciones únicas, modificando la carrocería de tal forma que el resultado es un coche único, con un nombre único. Un one-off, como se conoce en la industria.

Por supuesto, este tipo de servicio solo está reservado a los clientes más importantes de Ferrari. El proceso de creación cuenta con la participación del pagador, aunque siempre acompañado de un equipo de expertos que asesoran en todo momento al cliente acerca de lo que es posible y lo que no.

El proyecto de elaboración de un one-off lleva mucho tiempo, con clientes que deben esperar incluso varios años desde que realizan el encargo hasta que reciben el vehículo. Por no hablar de la factura. Un nivel de personalización tan elevado supone pagar varios millones de euros por un coche que, además, es único en el mundo, toda una rareza.

Marcas como Lamborghini, con su programa Ad Personam, o Porsche, con su división Porsche Exclusive, también ofrecen un servicio de personalización a sus clientes. Sin embargo, el nivel de detalle y modificación que permite el programa de Ferrari a sus clientes es único, a la altura de muy pocos grandes fabricantes.

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Etiquetas: Coches deportivosFerrari

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