MIRA LA RESEÑA DE LA PELÍCULA DEL PRÓXIMO EPISODIO
La fallida modificación de la Ley de Suelo vuelve a entorpecer al sector inmobiliario en 2024

Los Berrocalesidealista/news

27 Diciembre 2024, 6:01
El año 2024 ha sido testigo de un principio de consolidación en el mercado de suelo dentro del sector inmobiliario español, con un fuerte protagonismo de las inversiones, las tensiones normativas y la búsqueda de soluciones para enfrentar la creciente demanda de vivienda. La compra, venta y gestión del suelo han centrado buena parte de las estrategias de las principales promotoras y fondos de inversión, mientras que los desafíos regulatorios y económicos han condicionado notablemente el panorama.
Las principales empresas promotoras han protagonizado importantes movimientos para asegurar reservas de suelo destinadas a proyectos residenciales y de alquiler, especialmente en las grandes ciudades como Madrid, donde el déficit de vivienda sigue siendo considerable. Aedas Homes ha invertido más de 220 millones de euros en suelo a lo largo del año, lo que le permitirá construir 2.500 viviendas nuevas, y anunció que seguirá destinando más de 150 millones anuales a este objetivo. Metrovacesa, por su parte, mostró su predisposición a adquirir nuevos suelos, además de consolidarse con su participación en las subastas más competitivas, como las de Valdecarros y Berrocales.
Otras promotoras, como Neinor o Habitat, también intensificaron sus esfuerzos en el mercado del suelo, mientras fondos como Mazabi y los fundadores de Aelca apostaron significativamente por suelos no finalistas, demostrando interés tanto en proyectos a largo plazo como en el desarrollo de grandes nuevos barrios en las áreas en expansión de ciudades como Madrid y Alcorcón. ASG Homes, por otro lado, anunció que invertirá hasta 150 millones de euros en suelo para proyectos específicos como viviendas para sénior.
Suelo para proyectos alternativos y fines sociales
La oferta de suelo no estuvo únicamente destinada a proyectos residenciales tradicionales. Sareb, por ejemplo, lanzó un ambicioso plan para ofrecer 4.770 suelos a municipios pequeños con fines sociales. Asimismo, Servihabitat puso más de 1.500 suelos en venta, ofreciendo en ciertos casos descuentos de hasta el 45%. Iniciativas como estas han buscado facilitar la movilización de suelo no productivo para atender tanto necesidades sociales como la vivienda asequible.
Por otro lado, el interés en el desarrollo de infraestructuras empresariales también creció. En este sentido, Conren Tramway adquirió suelo en el distrito 22@ de Barcelona para levantar oficinas, confirmando que el segmento terciario también despertó el apetito inversor durante este año.
Cambios normativos: la polémica reforma de la Ley del Suelo
La modificación de la Ley del Suelo marcó la agenda política del año, generando un acalorado debate entre actores del sector público y privado. El Gobierno, apoyado por miembros del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, impulsó cambios legislativos con la intención de desbloquear suelo, combatir la burocracia y limitar el presunto “chantaje” de ciertos actores sobre el uso del suelo. Sin embargo, la propuesta enfrentó fuertes resistencias en el Congreso, especialmente de Sumar, Podemos, ERC y Junts, quienes rechazaron la reforma argumentando que no garantizaba un equilibrio sostenible ni social adecuado.
La falta de acuerdo político impidió que la nueva Ley del Suelo lograra el respaldo necesario para una transformación normativa significativa, dejando al sector y a los promotores en incertidumbre de cara a 2025. No obstante, APCEspaña y otras entidades del sector inmobiliario han valorado positivamente los intentos, indicando que una revisión de esta naturaleza es clave para reactivar el desarrollo de viviendas en suelo acumulado o en zonas de uso productivo.
El comportamiento del mercado del suelo
En el plano económico, el mercado del suelo vivió una evolución dispar. Aunque el precio medio del suelo urbano registró una caída del 3,3% al cierre de 2023, durante los primeros meses de 2024 los precios alcanzaron máximos de los últimos siete años en zonas urbanas clave debido a la creciente demanda y la escasez de terrenos disponibles. Esta tendencia estuvo acompañada de movimientos como la subasta de activos de Reyal Urbis, con descuentos históricos del 70%, que despertaron el interés de múltiples inversores.
Por otro lado, numerosos analistas destacaron que la falta de oferta de suelo finalista sigue siendo uno de los mayores retos del sector. Actores relevantes como Sergio Gálvez de AQ Acentor señalaron que, si no se toman medidas concretas, esta situación podría seguir encareciendo los proyectos urbanísticos y obstaculizando el acceso a la vivienda.
Perspectivas y retos hacia el futuro
Con el cierre del año, el mensaje de los grandes operadores en el sector inmobiliario es claro: la disponibilidad de suelo, especialmente suelo finalista, es cada vez más baja, lo que pone en riesgo el desarrollo de nuevos proyectos habitacionales. A pesar de los esfuerzos de empresas como Aliseda, que buscan movilizar suelo privado para atender el déficit, y las iniciativas de colaboración público-privada como las subastas de suelo protegido, el sector enfrenta una encrucijada entre los retos económicos y las barreras normativas.
Además, los expertos advierten que el mercado deberá adaptarse a medidas más expansivas para garantizar la inclusión de sectores vulnerables y favorecer el acceso a la vivienda asequible. Hasta ahora, iniciativas como los suelos sociales en pequeñas localidades han abierto nuevos caminos, aunque su impacto a medio plazo sigue siendo limitado.
En definitiva, 2024 ha sido un año de gran dinamismo, inversiones ambiciosas y reestructuración del mercado del suelo en España, aunque muchos de los problemas estructurales que afectan al sector, como la disponibilidad, el precio y la burocracia normativa, siguen pendientes de resolverse. Las decisiones que se tomen en 2025 serán clave para definir cómo evolucionará este segmento esencial del sector inmobiliario en los próximos años.