MIRA LA RESEÑA DE LA PELÍCULA DEL PRÓXIMO EPISODIO

Es uno de los mejores SUV, pero también de los más desconocidos. Ahora, el Mazda CX-60 se renueva para 2025

Mario Herráez

22 ene. 2025 12:09h.Compartir

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El todocamino grande de Mazda incorpora ligeros retoques, pero mantiene intactas sus señas de identidad, como es su motor diésel de seis cilindros.

La apuesta de Mazda por los SUV es importante. Como ocurre con otros tantos fabricantes, forman la mayor parte de su gama y entre todos sus todocaminos hay un modelo bastante interesante, pero que no recibe toda la atención que merece, el Mazda CX-60. Para intentar solucionarlo, la firma japonesa lo actualiza de cara a 2025.

No se trata de una renovación profunda, si no más bien de una puesta al día ligera que introduce retoques aquí y allá para hacer que el modelo se sienta más fresco.

A nivel de diseño no hay ningún cambio aparente, manteniendo su estilizada figura, la reconocible parrilla con forma de diamante, con un marco en la sección inferior y una carrocería que prescinde de las habituales protecciones de plástico, lo que le da una imagen más limpia.

La única novedad a este respecto es la incorporación del Zircon Sand Metallic a la paleta de colores exteriores que ya estaba disponible. El Arctic White es el tono de serie, pero también están disponibles opcionalmente el Soul Red Crystal, el Machine Grey, el Rhodium White, el Sonic Silver, el Platinum Quartz, el Deep Crystal Blue y el Jet Black.

Su gama de acabados tampoco varía, manteniéndose las siguientes opciones: Primer-Line, Excusive-Line, Homura, Homura Plus, Takumi y Takumi Plus.

El único que incorpora novedades es el Homura. Sus asientos ahora son de napa negra, los paneles interiores lucen una tapicería de piel artificial de vinilo, tanto el techo y como los pilares que dan al interior cuentan con un revestimiento negro y los paneles del interior tienen un tono negro mate con acabado metálico.

Tampoco hay variaciones en su gama mecánica, que sigue estando conformada por tres alternativas, dos diésel y otra híbrida enchufable, todas ellas con una caja de cambios automática de 8 velocidades.

Empezando por las de gasóleo, ambas emplean el mismo motor e-Skyactiv D, un bloque de 3,3 litros y seis cilindros en línea que se ofrece en dos niveles de potencia distintos. En su versión de acceso entrega 200 CV y emplea un sistema de tracción trasera; mientras que en la superior llega a los 254 CV y se combina con la tracción integral Mazda i-Activ AWD.

Gracias a la tecnología DCPCI, con el primero homologa un gasto de combustible de 4,9 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 127 g/km; y con el segundo registra 5,3 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 137 g/km.

El tope de gama es el híbrido enchufable, con la tecnología e-Skyactiv PHEV. Su núcleo es un motor gasolina 2.5 Skyactiv-G tetracilíndrico de aspiración natural que se combina con uno eléctrico que aporta 100 kW, logrando un rendimiento conjunto de 327 CV de potencia y 500 Nm de par. 

Redondea el conjunto una batería de 17,8 kWh de capacidad, que le otorga una autonomía eléctrica de 63 km y le permite homologar un consumo de combustible de 1,4 l/100 km, así como unas emisiones de CO2 de 32 g/km. Así, luce en el parabrisas la etiqueta CERO de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Hace tiempo que el fabricante nipón anunció que completaría la gama mecánica con otro motor de gasolina, un e-Skyactiv 3.0 de seis cilindros en línea, que disfrutaría de la etiqueta ECO gracias al sistema microhíbrido de 48 voltios, pero por el momento no se ha confirmado nada al respecto.

Mazda señala que mantiene “todo su refinamiento de conducción, con un sistema de suspensión delantero de doble horquilla y multibrazo trasero, clave para sus atributos de confort y estabilidad”.

Además, cuenta ahora con unos muelles traseros más blandos y unos amortiguadores más firmes, lo que da como resultado “una marcha más fluida y confortable”. Además, también se han recalibrado los sistemas de estabilidad.

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VÍDEO: Mazda CX-60 en movimiento, ¿qué te parece?

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El Mazda CX-60 2025 se pondrá a la venta en primavera de este mismo año, pero la marca no ha desvelado por el momento cuál será su precio. El modelo actual está disponible desde 52.948 euros.

Dicha tarifa corresponde al acabado Prime-Line, cuya dotación de equipamiento es ya bastante completa.

Está formada por: llantas de aleación de 18 pulgadas, tapicería de tela negra, compatibilidad inalámbrica con Android Auto y Apple CarPlay, Asistente inteligente de velocidad (ISA), cámara de visión trasera o control de ángulo muerto (BSM) con detector de tráfico trasero (RCTA) y función de ayuda al salir del habitáculo (Disembarkation Support Function).

A esto suma detector de fatiga, pantalla central de 12,3 pulgadas, reconocimiento por voz y táctil, reconocimiento de señales de tráfico (TSR), sensor de parking trasero, sistema de sonido con 8 altavoces, USB-C y sistema de navegación.

En el extremo opuesto está el Takumi Plus, disponible a partir de 68.684 euros y que disfruta de elementos como las llantas de aleación de 20 pulgadas, asientos delanteros y traseros calefactados (los delanteros, además, ventilados), el sistema de caga inalámbrica para teléfonos móviles o el sistema de audio BOSE con 12 altavoces.