MIRA LA RESEÑA DE LA PELÍCULA DEL PRÓXIMO EPISODIO
La ANA alerta de la inseguridad que genera el retraso del nuevo índice para actualizar los alquileres
El índice debe entrar en vigor en 2025 y aún no se ha creado, lo que está provocando inseguridad entre propietarios e inquilinos, según la Agencia Negociadora del Alquiler

idealista
2 Septiembre 2024, 12:03
La inseguridad jurídica está creciendo en el mercado del alquiler. Y uno de los focos es el retraso del nuevo índice para actualizar las rentas que debe entrar en vigor el próximo 1 de enero de 2025.
Según recuerda la Agencia Negociadora del Alquiler (ANA), la Ley de Vivienda que entró en vigor en mayo de 2023 “obliga al Gobierno a crear antes del 2025 un índice de referencia de actualización de rentas por el que deben regirse todos los arrendamientos de viviendas que se suscriban a partir del 1 de enero de 2024 y todos los arrendamientos de viviendas que deban actualizar sus rentas en el 2025″.
En concreto, dicha normativa introdujo un mandato al Instituto Nacional de Estadística (INE) para que defina antes del 31 de diciembre de 2024 un nuevo índice de referencia para la actualización anual de los contratos de arrendamiento de vivienda en sustitución al IPC y a los topes establecidos en los últimos años (del 2% en 2023 y del 3% en 2024).
A falta de menos de cuatro meses para que termine el plazo que establece la ley, la empresa especializada en arrendamientos critica que este nuevo índice “todavía no se ha creado, lo que está provocando una inseguridad importante que genera inquietud” tanto entre los propietarios como entre los inquilinos.
En su opinión, este índice debía haberse creado antes del 1 de enero de 2024, como ya alertó a finales del año paasdo. Si no se hacía de esta manera, insiste, “todos los nuevos arrendamientos que se suscribiesen a partir de dicha fecha iban a tener un vacío importante, porque ni arrendadores ni arrendatarios iban a poder conocer en el momento de la suscripción del arrendamiento mediante qué mecanismos o sistemas iban a actualizar sus rentas en el futuro”.
Así pues, defiende la compañía, “en todos los arrendamientos de viviendas que se han firmado en lo que va de año, ni arrendadores ni arrendatarios han podido conocer con anticipación si sus actualizaciones anuales de rentas iban a tener limitaciones o con qué índice se iban actualizar. Y esto ocurre porque los actuales límites del 3% que se están aplicando en este 2024 dejan de estar en vigor en 2025”.
Este escenario de incertidumbre está teniendo un impacto directo en el mercado del alquiler, provocando que los inversores estén buscando alternativas “más seguras que el alquiler, en donde puedan conocer por anticipado las reglas por las que van a regular sus inversiones”. Y también está afectando a los propietarios, ya sean ahorradores o grandes tenedores; y a promotores e inversores de viviendas destinadas al alquiler, que no disponen de datos suficientes “para hacer análisis financieros completos y calcular la rentabilidad de sus inversiones”.
Por ello, la compañía exige al Gobierno “más anticipación, trabajo y capacidad normativa para evitar problemas que ya sabían iban a surgir desde finales del 2023″; y, así, “evitar el actual deficit que está afectando a la oferta del alquiler de viviendas por la inseguridad existente”.